CAPÍTULO 13: "Solos en
casa"
"No abráis a
desconocidos. Id al instituto. No hagáis cosas de las que os podáis arrepentir.
No os quedéis toda la noche despiertos. Haceos la comida..." Esas y muchas
cosas más fueron las que repitieron tres millones de veces los padres de Laura
justo antes de irse.
Los cuatro chicos
comenzaron a ver la película tras despedirse de Ana y Juan.
-Se terminó - dijo
Néstor cuando terminó la película.
-¿Ah sí? No me
había dado cuenta - dijo Laura irónicamente.
-¿Qué hora es? - preguntó
Claudia.
-Las 20:30 -
respondió Kevin.
-Pues me voy a
duchar, que hace mucho calor, ¿no? - dijo mirando sólo a Kevin. Los chicos
pensaron en los dos sentidos, lo que ella quería - Mentes sucias... Bueno, eso.
Me voy a duchar.
Laura fue a su
cuarto para coger el pijama y ropa interior limpia. Cogió un pijama azul con
corazones de pantalón corto y camiseta de asillas y su ropa interior negra con
encaje. No sé qué va a pasar esta noche,
así que... esto le gustará a Kevin... Pensó Laura con una sonrisa.
Fue al baño y se
duchó en algo más de diez minutos. Al terminar cogió una toalla y se secó; se
puso la ropa que había cogido antes y sus cholas de andar por casa y se peinó.
Seguidamente bajó con sus amigos.
-Chicos, ¿quién va
ahora? - preguntó Laura al terminar de bajar las escaleras. Kevin, al ver a
Laura con ese pantalón tan corto, esa camiseta que dejaba ver su ombligo y
parte de su sujetador, se estremeció e intento relajarse, pero no tuvo mucho
éxito.
-Yo voy - dijo
Claudia. Le dio un beso cortito en los labios a Néstor y subió las escaleras.
-Voy a beber agua
chicos - dijo Néstor. Los chicos asintieron.
Laura se sentó en
el sofá junto a Kevin y al oído le susurró entre risas:
-Creo que tu
amiguito está contento...
Kevin miró su
entrepierna. Se había empalmado.
-¡Mierda! - gritó.
Laura no pudo evitar reír. -¿Ves lo que pasa cuando te pones ese tipo de
pijamas?
-Mmm... no... no
lo veo... tal vez si me pongo más cerca... - dijo Laura a la vez que se sentaba
a horcajadas sobre Kevin, lo que hizo que su erección creciera aún más.
-Joder...Laura...
no creo que sea ni el momento ni el lugar para... - dijo mientras suavemente la
apartaba de él.
-Vale Kevin. Sé
sincero. No quieres hacerlo conmigo. Está bien. Ya habrá otro momento para
perderla. Quizás otro chico... - dijo con indiferencia. Se levantó para coger
el mando de la televisión, pero Kevin la sujetó suavemente por el brazo e hizo
que se sentara sobre él como estaban antes. El chico le habló al oído:
-No vuelvas a
decir que no quiero hacerlo contigo. Créeme, es lo que más me gustaría hacer
ahora, pero tu primo está en la cocina, y mi hermana podría bajar en cualquier
momento. Y tampoco vuelvas a decir que quizás otro chico. Además, nada me
gustaría más que poder quitarte la virginidad - los dos sonrieron cuando dijo
esto último.
Los chicos
comenzaron a besarse apasionadamente. En los labios, en el cuello...
-¿Sabes? Arriba
hay una cama preciosa - dijo Laura en el oído de Kevin con algún gemido de por
medio.
Kevin cogió a
Laura en brazos y sin dejar de besarse subieron la escalera. Llegaron hasta la
habitación de los padres de Laura, pues era el único lugar con cama de
matrimonio. Cerraron la puerta con llave y se tiraron a la cama. Siguieron
besándose; esta vez lo besos también tuvieron lugar en el vientre de la chica.
Kevin se quitó la camiseta torpemente, y seguidamente se la quitó a Laura,
dejando ver así el sujetador que llevaba puesto.
-Uff... aquí el
amigo está desesperado - dijo Kevin al ver su enorme erección.
-Pues no le
hagamos esperar más - dijo Laura quitándose los pantalones.
Kevin también se
quitó los suyos y se tumbó sobre Laura con cuidado de no aplastarla.
Continuaron besándose y Kevin le quitó el sujetador a Laura. Ésta se sonrojó un
poco, pero se le pasó en seguida al ver que Kevin se quitaba sus bóxers grises.
Laura se quitó su tanga negra y Kevin cogió el preservativo que había cogido
justo antes de entrar en la habitación para más tarde comenzar a penetrarla.
Varios gemidos salieron por parte de ambos.
Kevin ya estaba un poco acostumbrado, pero al ser
la primera vez de Laura, el placer se le mezclaba con un poco de dolor; pero le
daba igual.
-Ah... Kevin... -
gimió Laura mordiéndose el labio inferior pasados unos minutos.
-Uff... estoy a
punto de estallar... - dijo Kevin embistiendo con más fuerza, pero sin hacer
daño a Laura.
-Córrete dentro de
mí - dijo Laura sin dejar de gemir.
-No me lo repitas
dos veces - y segundos después se corrió dentro de Laura, y ésta llegó al
orgasmo.
Kevin se tumbó
bajó las sábanas junto a Laura, y ninguno podía dejar de sonreír.
-¿De verdad fue tu
primera vez? - preguntó Kevin algo incrédulo.
-La primera, pero
no la última.
-Parecías toda una experta.
-¿Estás diciendo que parezco una puta? - dijo Laura con una sonrisa en los labios, cosa que Kevin no veía en la oscuridad.
-No, no. Yo nunca... quise decir eso. Es solo que... bueno ya sabes a mi me gustó tanto... que parecía...
-Ya lo sé, tonto. Era una broma.
Kevin rió nervioso.
-No pero ahora en serio, fue lo mejor que he hecho en mi vida.
-No me seas exagerado, anda.
-No soy exagerado, para ser la primera vez, lo hiciste genial.
-Bueno, tú puedes enseñarme a ser mejor, con práctica digo.
-No te me vayas a convertir en una adicta al sexo ¿eh? que después vas y te follas a cualquiera.
-Tranquilo, sólo contigo. Prometido.
-Más te vale.
-Parecías toda una experta.
-¿Estás diciendo que parezco una puta? - dijo Laura con una sonrisa en los labios, cosa que Kevin no veía en la oscuridad.
-No, no. Yo nunca... quise decir eso. Es solo que... bueno ya sabes a mi me gustó tanto... que parecía...
-Ya lo sé, tonto. Era una broma.
Kevin rió nervioso.
-No pero ahora en serio, fue lo mejor que he hecho en mi vida.
-No me seas exagerado, anda.
-No soy exagerado, para ser la primera vez, lo hiciste genial.
-Bueno, tú puedes enseñarme a ser mejor, con práctica digo.
-No te me vayas a convertir en una adicta al sexo ¿eh? que después vas y te follas a cualquiera.
-Tranquilo, sólo contigo. Prometido.
-Más te vale.
Mientras, en la
cocina Néstor sonreía. En ese momento, Claudia baja con un pijama de los
"101 dálmatas".
-¿Qué haces feo con complejo de hipopótamo verde? - ríe Claudia.
-¿En serio? Cada vez estoy más seguro de que tú y mi prima estáis en una secta secreta para acosarme y torturarme. - respondió él ofendido. Luego, añadió: - Bueno, y violarme. - le dedicó una sonrisa a Claudia.
-¡Salido! Yo solo te pregunté qué estabas haciendo. - le reprochó Claudia haciendo pucheros.
-Pero, ¿qué hago de qué?
-Llevas media hora sonriendo como un tonto ahí parado.
-Es sobre mi prima.
-Sabes que las relaciones entre familias están prohibidas, ¿verdad?
Néstor se acerca a Claudia y le da un tierno beso.
-Pues para mí eres como una hermana y te amo con toda mi alma.
-Tonto - respondió la chica, mientras le daba otro beso -Oye... hablando de violaciones... ¿eres un violador?
-¿Qué haces feo con complejo de hipopótamo verde? - ríe Claudia.
-¿En serio? Cada vez estoy más seguro de que tú y mi prima estáis en una secta secreta para acosarme y torturarme. - respondió él ofendido. Luego, añadió: - Bueno, y violarme. - le dedicó una sonrisa a Claudia.
-¡Salido! Yo solo te pregunté qué estabas haciendo. - le reprochó Claudia haciendo pucheros.
-Pero, ¿qué hago de qué?
-Llevas media hora sonriendo como un tonto ahí parado.
-Es sobre mi prima.
-Sabes que las relaciones entre familias están prohibidas, ¿verdad?
Néstor se acerca a Claudia y le da un tierno beso.
-Pues para mí eres como una hermana y te amo con toda mi alma.
-Tonto - respondió la chica, mientras le daba otro beso -Oye... hablando de violaciones... ¿eres un violador?
-Claro, pero
todavía no te he violado porque primero he de camuflarme y ganarme tu confianza
para luego poder llevarte a la cama a la fuerza.
-¿Sabes? Si sigues
así, no creo que haga falta llevarme por la fuerza - respondió Claudia saliendo
de la cocina hacia el salón. Néstor no podía creer lo que le acababa de decir
Claudia.
Espera,
¿me acaba de mandar una indirecta diciéndome que quiere acostarse
conmigo? No... no puede ser... ¿o sí? Pensaba
Néstor aún confuso.
-¡Néstor! ¿te
duchas? - le gritó Claudia desde el salón.
-¿Eh? Sí claro,
voy.
*De vuelta a la
habitación de los padres de Laura*
-Me gusta estar
así - comentó Laura
-¿Cómo? ¿Los dos
desnudos en una cama y tu mano en mis partes?
-¡No! Primero:
¿Por quién me tomas? ¿Por una salida, sexópata, violadora, puta? Y segundo: no
te la estoy tocando.
-Bueno... eso...
versión unicornia - respondió Kevin con una sonrisa. Laura no se lo tomó con
tanto humor.
-¿Por qué los tíos
siempre la tenéis que cagar en los momentos más bonitos? - protestó Laura
mientras se levantaba con la intención de vestirse.
-¿No se supone que
te gustan los unicornios?
-Déjalo.
Acto seguido, Laura coge su ropa y se va al baño. Allí se ducha, se cambia y sale echa una furia.
-Laura, ¡espera! - le pide Kevin.
Pero Laura no le hace caso, sale de la habitación y se dispone a bajar las escaleras. Pero Kevin, que también se había vestido, se lo impide.
-No me puedo creer que te pongas así por una tontería.
-¿Encima es una tontería? ¿Es que no tienes un poquito de respeto? Fue mi primera vez Kevin. Te pones con gilipolleces y encima sigues. Tú mismo, pero yo no me pienso quedar para oír tonterías de la boca del chico al que amo - grita Laura. Emprende su bajada por las escaleras y sale de la casa dando un portazo.
Néstor y Claudia, que habían escuchado todo, y además habían visto salir a Laura, se miraron preocupados. Observaron que Kevin había subido otra vez tras un largo suspiro, una cara de enfado y un puñetazo a la pared.
-¿Qué crees que ha pasado? - preguntó Néstor.
-Que la han cagado.
-Que lista eres, admiro tu inteligencia. - dice Néstor con ironía.
-Es verdad. Seguro que mi hermano le ha dicho algo. Ya lo arreglarán, se aman tanto que ahora mismo veras a mi hermano salir a por ella.
Néstor sonríe.
-Por cierto, todavía no me has contado por qué sonreías antes.
-Ah, es que Kevin y Laura lo estaban haciendo.
Claudia le miró sorprendida.
-¿¡MI MEJOR AMIGA PIERDE LA VIRGINIDAD CON MI HERMANO Y NO ME LO DICE NINGUNO DE LOS DOS!? Como se nota que es una subnormal con complejo de unicornio volador... y el otro un idiota perdido con complejo de koala... Aunque bien pensado, creo que por eso les quiero tanto...
-Pues para no enterarte mi amor... daban unos gritos que creo que se oyeron en todo el vecindario. ¿Koala?
-A veces le da "vaguititis" al pobre.
-Claro. Eso es muy normaaaaal. - contesta Néstor mientras le da unas palmaditas a Claudia en la cabeza.
-Oye ahora sí que estoy preocupada. Te importa si...
-Vete con tu hermano, buscaré a mi prima. Y después al revés, ¿de acuerdo?
-Vale.
Claudia sube al piso de arriba en busca de su hermano. Pronto lo encontró, estaba en la habitación de Laura. Claudia lo observó durante unos minutos. Más que enfadado parecía triste.
-Kevin, ¿estás bien?
-No. - dijo enfadado.
Claudia se acercó más a él. Kevin estaba tumbado en la cama boca arriba, mirando al techo.
-¿Me cuentas qué pasó?
-No. - contestó el chico, más tranquilo.
-¿Puedo ayudar?
-No. - susurró.
-Kevin. Mírame. - le obligó Claudia.
-No. - contestó apenas con la voz quebrada. Pronto Kevin no aguantó más y las lágrimas cayeron poco a poco de sus ojos.
Claudia suspiró.
-Cuéntame que pasó, anda.
Kevin obedeció y se lo explicó todo a su hermana.
-Entiendo. Kevin, ¿eres gilipollas?
-Sí.
-A ver, prácticamente la llamaste sexópata, puta, violadora, salida, y dices que se enfada por una tontería. Yo no me hubiera puesto así, pero dado que estabais en una situación delicada... pues yo creo que deberías ir a pedirle perdón. De todas maneras, Néstor seguramente vendrá a hablar contigo. Ya sabes, los dos sois tíos y ustedes se entienden.
-Gracias Claudia, eres la mejor hermana que pudiera desear.
-Lo sé.
Kevin sonrió un poco.
-¡Ey! Has sonreído. Soy increíble.
-Bueno, pero es una sonrisa tan pequeña que solo se ve con un microscopio. - aclaró su hermano con total sinceridad.
-Bueno pues yo la veo...
-Creo que no se me dan bien las matemáticas...
-Kevin, eso es biología...
-¿Sabes? Creo que deberías bajar ya, seguro que Laura quiere hablar contigo.
-Bueno, tú cambia de tema, pero mamá te echará la bronca como no saques la carrera. - rió Claudia mientras sale de la habitación.
-Déjalo.
Acto seguido, Laura coge su ropa y se va al baño. Allí se ducha, se cambia y sale echa una furia.
-Laura, ¡espera! - le pide Kevin.
Pero Laura no le hace caso, sale de la habitación y se dispone a bajar las escaleras. Pero Kevin, que también se había vestido, se lo impide.
-No me puedo creer que te pongas así por una tontería.
-¿Encima es una tontería? ¿Es que no tienes un poquito de respeto? Fue mi primera vez Kevin. Te pones con gilipolleces y encima sigues. Tú mismo, pero yo no me pienso quedar para oír tonterías de la boca del chico al que amo - grita Laura. Emprende su bajada por las escaleras y sale de la casa dando un portazo.
Néstor y Claudia, que habían escuchado todo, y además habían visto salir a Laura, se miraron preocupados. Observaron que Kevin había subido otra vez tras un largo suspiro, una cara de enfado y un puñetazo a la pared.
-¿Qué crees que ha pasado? - preguntó Néstor.
-Que la han cagado.
-Que lista eres, admiro tu inteligencia. - dice Néstor con ironía.
-Es verdad. Seguro que mi hermano le ha dicho algo. Ya lo arreglarán, se aman tanto que ahora mismo veras a mi hermano salir a por ella.
Néstor sonríe.
-Por cierto, todavía no me has contado por qué sonreías antes.
-Ah, es que Kevin y Laura lo estaban haciendo.
Claudia le miró sorprendida.
-¿¡MI MEJOR AMIGA PIERDE LA VIRGINIDAD CON MI HERMANO Y NO ME LO DICE NINGUNO DE LOS DOS!? Como se nota que es una subnormal con complejo de unicornio volador... y el otro un idiota perdido con complejo de koala... Aunque bien pensado, creo que por eso les quiero tanto...
-Pues para no enterarte mi amor... daban unos gritos que creo que se oyeron en todo el vecindario. ¿Koala?
-A veces le da "vaguititis" al pobre.
-Claro. Eso es muy normaaaaal. - contesta Néstor mientras le da unas palmaditas a Claudia en la cabeza.
-Oye ahora sí que estoy preocupada. Te importa si...
-Vete con tu hermano, buscaré a mi prima. Y después al revés, ¿de acuerdo?
-Vale.
Claudia sube al piso de arriba en busca de su hermano. Pronto lo encontró, estaba en la habitación de Laura. Claudia lo observó durante unos minutos. Más que enfadado parecía triste.
-Kevin, ¿estás bien?
-No. - dijo enfadado.
Claudia se acercó más a él. Kevin estaba tumbado en la cama boca arriba, mirando al techo.
-¿Me cuentas qué pasó?
-No. - contestó el chico, más tranquilo.
-¿Puedo ayudar?
-No. - susurró.
-Kevin. Mírame. - le obligó Claudia.
-No. - contestó apenas con la voz quebrada. Pronto Kevin no aguantó más y las lágrimas cayeron poco a poco de sus ojos.
Claudia suspiró.
-Cuéntame que pasó, anda.
Kevin obedeció y se lo explicó todo a su hermana.
-Entiendo. Kevin, ¿eres gilipollas?
-Sí.
-A ver, prácticamente la llamaste sexópata, puta, violadora, salida, y dices que se enfada por una tontería. Yo no me hubiera puesto así, pero dado que estabais en una situación delicada... pues yo creo que deberías ir a pedirle perdón. De todas maneras, Néstor seguramente vendrá a hablar contigo. Ya sabes, los dos sois tíos y ustedes se entienden.
-Gracias Claudia, eres la mejor hermana que pudiera desear.
-Lo sé.
Kevin sonrió un poco.
-¡Ey! Has sonreído. Soy increíble.
-Bueno, pero es una sonrisa tan pequeña que solo se ve con un microscopio. - aclaró su hermano con total sinceridad.
-Bueno pues yo la veo...
-Creo que no se me dan bien las matemáticas...
-Kevin, eso es biología...
-¿Sabes? Creo que deberías bajar ya, seguro que Laura quiere hablar contigo.
-Bueno, tú cambia de tema, pero mamá te echará la bronca como no saques la carrera. - rió Claudia mientras sale de la habitación.
*Mientras, en alguna calle de Madrid*
-Joder, ¿dónde se
metió la unicornia ésta con cerebro de ornitorrinco rosa? - dijo Néstor en voz
alta sin darse cuenta. La gente que pasaba a su lado le miró con cara de
"¿Te has tomado las pastillas de la cabeza?".
Néstor siguió
caminando por las calles hasta que recordó que a Laura le encantaba una
heladería que estaba por allí cerca; así que se dirigió allí.
Cuando llegó,
entró y divisó a Laura. Allí estaba, comiéndose un helado de vainilla, con los
ojos rojos e hinchados y rímel corrido por sus pómulos y mejillas.
¿Y qué hace una heladería abierta a las
doce de la noche? Bah... eso es lo que menos importa ahora.
-Hola. Buscaba a
una unicornia voladora con cerebro de ornitorrinco rosa y complejo de lagarto
azul, ¿la has visto? - dijo Néstor sentándose en frente de su prima.
-No. Pero he visto
a un mapache amarillo con cerebro de cactus y complejo de gota de agua. ¿Te
sirve?
-Sí, creo que
estamos hablando de la misma persona. Oye, ¿qué pasó con Kevin? Por el ruido
todo parecía ir bien - dijo Néstor intentando contener la risa en esta última
frase.
-Sí... al
principio fue todo bien... hasta que me llamó sexópata, puta, violadora y
salida en versión unicornia. Y encima dice que me enfado por tonterías - Laura
volvió a estallar y no pudo aguantar las lágrimas.
-Ey, ey, ey. No
llores princesa. Nadie en este puto mundo merece tus lágrimas. Venga, vámonos
de aquí - le consoló Néstor dándole un fuerte abrazo.
-Pero no he pagado
el helado.
-Venga, yo te lo
pago.
-Menos mal... no
traje dinero...
-¿Ves como tienes
cerebro de ornitorrinco rosa? - dijo Néstor sonriendo. Eso hizo que Laura
también sonriera mínimamente. - Vamos a casa, anda. Claudia quiere hablar
contigo. Por cierto, ¿qué hace una heladería abierta a las doce de la noche?
-¿Lo que pone en
el cartel de "Heladería veinticuatro horas", no te da una pista?
-Vale, déjame -
contestó Néstor con una risilla.
Y los primos
fueron camino a la casa. Néstor intentaba hacer reír a Laura, pero no tuvo
mucho éxito.
Pues sí que está enamorada... Joder
Kevin... ¿qué mierdas hiciste? Se
preguntaba Néstor por el camino.
-¿Abres o qué? -
preguntó Laura a Néstor.
-¿Qué? - dijo el
chico distraído.
-Que si abres.
Llevas tres horas ahí parado delante de la puerta de mi casa.
-Ah, sí. Perdona,
estaba pensando - sacó sus llaves del bolsillo y abrió la puerta de la casa.
-Pues ya somos
dos.
-¿Y qué pensabas?
-Que creo que
quiero demasiado a Kevin.
-¿Y le vas a
perdonar?
-Ya veremos.
-¡¡LAURA!! - gritó
Claudia desde el salón cuando la vio entrar.
-Hola - respondió
Laura con tono antipático.
-Ven, vamos a
hablar. Néstor, ¿hablas tú con el gilipollas aquel? - dijo Claudia. Laura
suspiró y Néstor asintió, para después subir la escalera hacia el cuarto de
Laura. -Ven, siéntate cariño - añadió sentándose en el sillón del salón. Laura
obedeció - He estado hablando con Kevin. Ha estado llorando un buen rato... ¿Le
vas a perdonar?
-No lo sé Claudia,
no lo sé. Le quiero un montón, pero lo que hizo me dolió mucho... me llamó...
pff no quiero ni acordarme - dijo Laura a la vez que una lágrima caía de sus
ojos y resbalaba por su mejilla.
-Shh. Tranquila,
no llores. Todo se va a arreglar - le consoló Claudia a la vez que se acercaba
a Laura para abrazarla.
-Laura, ¿podemos
hablar? - intervino Kevin, que bajaba de la habitación. Laura se incorporó, ya
que tenía la cabeza en las piernas de Claudia y su cuerpo estirado en el
sillón; luego se encogió de hombros intentando mostrar indiferencia.
-Bueno, os dejamos
hablar - dijo Claudia levantándose y yendo a la cocina con Néstor.
Kevin se sentó
junto a Laura. Las manos le sudaban, casi temblaba. Se rascó la nuca algo
incómodo y comenzó a hablar: -Laura, yo... pff soy un completo idiota. No lo
hice con mala intención, solo era una broma, pero debí pensarlo mejor. Yo te...
yo te amo Laura, y tú lo sabes - Laura miraba a la televisión, aunque estaba
apagada, pero no quería mirar a Kevin - Siento haberte hecho tanto daño... Me
arrepentiré de eso toda mi vida... Y quiero que sepas que te comprenderé si no
quieres perdonarme, o prefieres dejarme... no sé... no te faltaría razón. De
verdad que lo siento - Kevin agachó la cabeza arrepentido.
En la sala se
formó un mar de lágrimas. Ninguno podía dejar de llorar. Kevin porque podía
perder a la chica a la que amaba por
decir una idiotez, y Laura por el daño y la confusión.
Laura estaba hecha
un lío. Quería perdonar a Kevin, pero no resultaba tan fácil; le había llamado
puta, sexópata, salida y violadora...
-Kevin... - Laura
miró a los ojos a su novio - Quiero perdonarte, créeme... pero no es fácil...
-Lo entiendo...
¿Puedo hacer algo para que me perdones?
-Sí. Esperar y
darme tiempo para pensar.
-Vale... lo haré.
-Buenas noches -
se despidió Laura mientras se levantaba y le daba a Kevin un beso en la mejilla
- Que descanses.
-Hasta mañana. Te
quiero.
Laura se dirigió a
la cocina para despedirse de Claudia y Néstor.
-Buenas noches
chicos - se despidió dándole un beso en la mejilla a cada uno.
-Buenas noches -
dijo Néstor devolviéndole el beso.
-Laura, ¿quieres
que duerma contigo? - preguntó Claudia preocupada
-O yo, si quieres
- propuso Néstor.
-Da igual chicos.
Me da igual dormir con Kevin... al fin y al cabo le quiero, y es mi novio... -
tras decir eso, Laura soltó un suspiro.
Kevin se quedó en
el salón, mirando a ninguna parte. No dejaba de repetirse lo imbécil que era, y
sin darse cuenta, una lágrima resbaló por su mejilla.
-Ey, hermanito. No
llores. Verás como todo se arregla - dijo Claudia con una sonrisa, que entraba
en el salón con Néstor. Kevin intentó sonreír - Nosotros nos vamos a la cama.
¿Quieres dormir con Laura o prefieres que vaya yo?
-Tranquilos, yo
dormiré con ella. Buenas noches - Claudia le dio un beso en la mejilla y Néstor
le dio unas palmaditas en la espalda.
Cuando pasaron un
par de minutos, Kevin decidió irse a dormir. Casi era la una de la madrugada.
-Laura, ¿estás
dormida? - susurró Kevin desde la puerta del cuarto de los padres de Laura, ya que Néstor y Claudia se habían ido
a la habitación de la chica.
¡Mierda! ¿Y ahora qué hago? ¿Me hago la
dormida o le digo que no puedo dormir porque no he dejado de llorar? Joder... Pensaba Laura desde la cama.
-¿Laura? - repitió
Kevin. Al no obtener respuesta, entró. Se quitó los pantalones y la camiseta,
dejando al descubierto ese cuerpo que tanto le gustaba a Laura.
Jooodeeeeeeeeer... encima ese cuerpazo que
me lo pone delante... Laura
no dejaba de morderse el labio. Tenía unas ganas enormes de ir hasta él,
besarlo y volver a hacerle el amor; pero no, no era el momento.
Kevin se puso unos
pantalones cortos y se metió en la cama.
-Laura... -
comenzó a susurrarle Kevin en el oído a la chica - Joder soy un completo
idiota... Sé que no me oyes pero... pensar que puedo perderte... se me hace un
nudo en el estómago solo de pensarlo. ¿Cómo se me ocurrió decirle aquello a la
chica que tanto quiero, al motivo de mi sonrisa, a la mejor persona de este mundo,
a la cosita más bonita...? Ojalá me perdones. Ojalá me dejes volver a ser tu
príncipe. ¿Recuerdas el día que empezamos a salir, Cenicienta? - los dos
sonrieron al recordar la escenita del zapato en casa de Claudia, pero Kevin no
podía ver la maravillosa sonrisa de Laura - Siempre recordaré ese día. ¿Sabes? Es curioso cómo un día puede
ser el mejor y el peor de tu vida a la vez, cómo cambia todo por una frase... -
Kevin se derrumbó y volvió a llorar.
-Kevin, yo... -
dijo Laura mirándole a los ojos.
-¡Joder! ¡Qué
susto! ¿Estabas despierta? ¿Oíste todo lo que te dije?
-Sí.... bueno,
supongo que estuvo mal.. pero no tenía ganas de hablar contigo.
-Ya... lo
entiendo... yo ni si quiera tendría ganas de mirarme... Joder, doy asco - dijo
mientras se tumbaba boca arriba y miraba el techo.
-Kevin... mírame -
Kevin obedeció. Ladeó la cabeza ligeramente para mirar a su novia a los ojos -
Kevin, yo te quiero. Creo que lo hago desde que te conocí en el hospital... Y
no voy a dejar de hacerlo ahora por un intento de broma. No actuaste bien, pero
creo que yo estuve un poco borde también... Si por mí fuera estaría todo el
puto día besándote o... ya sabes...
-Entonces... ¿me
perdonas?
-Claro idiota - y
dicho esto Laura se acostó sobre Kevin y comenzó a besarle como nunca antes lo
había hecho.
-Laura... ¿vamos a
volver a hacer el amor? - dijo Kevin entre gemidos.
-¿Por qué no? Es
gratis - respondió la chica también entre gemidos.
-Pero... no tengo
condones.
-Mi padre tiene en
la mesilla - dijo Laura mientras se quitaba la camiseta y luego los pantalones.
Le quitó los pantalones a Kevin y se quitó el sujetador y las braguitas que
llevaba puestos. Kevin se quitó lo bóxers y Laura introdujo el
"amiguito" de Kevin en su boca, lo que hizo que Kevin gimiera como
nunca antes. Tras un rato de placer para Kevin, éste decidió comenzar a
penetrar a su chica.
-Ah... Kevin... -
dijo Laura gritando y agarrando con fuerzas las sábanas de la cama.
-Dios... me pone
demasiado que grites mi nombre - dijo Kevin volviendo a entrar dentro de Laura.
-¡Kev...in!
Sigue... - pidió Laura a gritos.
*En la habitación
de Laura*
-Claudia, ¿estás
despierta? - susurró Néstor
-Pues para no
despertarse con esos dos gritando como si no hubiera un mañana - respondió
Claudia - Espera... si lo están haciendo... entonces es que Laura le perdonó...
¿no?
-Sí, supongo. Menos mal. Oye... Claudia...
-Dime.
-¿Recuerdas antes,
en la cocina cuando te dije que era un violador y todo eso?
-Claro, no tengo
tan poca memoria.
-Pues... ¿a qué te
referías cuando dijiste que si seguía así no tendría que llevarte a la fuerza?
¿Quieres acostarte conmigo? No es que yo no quiera pero... - dijo Néstor
nervioso.
-Néstor - le cortó
Claudia - Pues sí, me gustaría perderla contigo. No sé cuando, pero de momento
no. No creo que esté preparada... Laura siempre ha sido muchísimo más suelta
que yo... ya ves, lo ha hecho dos veces en una noche... Pero sí, me gustaría
hacerlo contigo - explicó Claudia.
-Ah... - suspiró
Néstor - A mí también me gustaría hacerlo contigo... Es más, si estuvieras preparada,
te lo haría aquí y ahora... pero esperaré, no te preocupes.
-Gracias.
*En el cuarto de
los padres de Laura*
-¿Sabes? Vas
cogiendo práctica - le dijo Kevin a Laura. La chica tenía la cabeza en el pecho
de su novio, y éste rodeaba los hombros de la chica con su brazo izquierdo.
-Tengo un buen
maestro, la verdad - dijo Laura. Kevin
rió - ¿Crees que habremos despertado a los chicos?
-Pues... supongo.
Con los gritos que dabas...
-Dijo don
silencioso... - respondió Laura con sarcasmo.
-Silencioso es mi
segundo nombre. Kevin Silencioso Rodríguez Sánchez. ¿No te lo había dicho
nunca?
Laura rió, Kevin
también lo hizo.
-Kevin... mañana
no tengo ganas de ir al instituto...
-¿Con
"mañana" te refieres a dentro de unas horas?
Laura miró el
reloj.
- Sí, me refiero a
eso.
-Bueno, puedes ir
al instituto, o puedes quedarte aquí conmigo, haciendo... lo que tú quieras.
Podemos leer. Podemos escribir un libro. Podemos dibujar. Podemos...
- ¡Hacernos una
foto! - gritó Laura. Se puso rápidamente su ropa interior y salió corriendo de
la habitación. Tras unos segundos volvió con una cámara de fotos en la mano.
-Wow. Una Nikon
profesional ¿eh?
-Sí, bueno... mis
padres me la regalaron hace unos años... querían que me apuntara a un curso de
fotografía, del cual pasé olímpicamente. Ahora me arrepiento... Bueno, ¿foto?
-Foto - Laura encendió la
cámara y se sacaron varias fotos, de las cuales la mayoría besándose._________________________________________________________________________________
Hello everyone :D Bueno, ¿qué tal todo por ahí? ¿Qué tal el veranito? Espero que genial :3
Antes que nada: SI, nos quedó UN POCO pornoso :$ perdón si no te gustan ese tipo de escenas y de nada si te gustan ;)
En fin, que esperamos que os super encante y bueno, ya nos "veremos" cuando volvamos a publicar. Besitos *3*
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